Un audífono es la solución más sencilla para la mayoría de las pérdidas auditivas pero, solo en el caso en que hablemos de una adaptación personalizada.

Dejar de oír, en ocasiones, implica tener que renunciar a la práctica de ciertas actividades que considerábamos necesarios o interesantes. Llegados a este punto deberíamos buscar soluciones.

Desde el principio podemos ayudarle a recuperar ese estilo de vida que ha ido peridendo paulatinamente por su pérdida auditiva. No espere un solo día más. Le vamos a ofrecer soluciones auditivas de última tecnología y diseño para volver a disfrutar de una vida plena y feliz.

Dada la complejidad de nuestro sistema auditivo, desde el pabellón auditivo hasta el cerebro, la obtención de un diagnóstico adecuado será fundamental para poder mejorar su audición.

Para una buena adaptación de audífonos no existen recetas mágicas ni genéricas por lo que, en nuestro Centro Audiológico, una vez conocidas sus rutinas, actividades y estilo de vida en general, le ofreceremos, en todo momento, el audífono más apropiado compatible con su pérdida auditiva.

El proceso de adaptación a los audífonos siempre es necesario y no responde a un tiempo concreto ya que cada persona requerirá un tiempo diferente.

Desde el principio percibirá una mejoría notable en su audición, recordando sonidos ya olvidados, que a su vez le proporcionará seguridad y confianza en su día a día. Durante las primeras semanas iremos efectuando ajustes basándonos en sus experiencias y sensaciones hasta obtener el objetivo final que será su completa adaptación.